Libre, atrevida y loca

Me miras como sin acabaras de encontrarte al mar en el medio del desierto. Aunque tratas de escabullirte por entre medio de la arena de alguna que otra forma te terminas bañando en mis aguas. Es como una dimensión aparte, se que lo pensas, pero esa boca tuya que no hace más que decir barbaridades, llenas de protocolos, se queda en silencio cuando aparezco de frente.
Soy todo lo que tus viejos jamás si imaginaron, y cada vez que llego tu ansia es como cuando estás por ver que pasa en el próximo capítulo de un libro ¿cómo voy a ir vestida?
¿Que mierda va a decirme ahora?
¿Con qué cosa vamos a discutir?
¿Que libro trae en su cartera?
¿En qué parte de San Juan se va a desnudar y me va a pedir que la llene?
¿Ahora con qué ira a llorar?
¿Con qué mierda irá a reír?
Y yo se que cada vez que doy la vuelta, algo dentro tuyo te deja pensando si existirá alguna forma de que me quede quieta. Vos que estuviste toda tu vida pensando sobre los kamikazes, y escuchando balada para un loco, ahora tenes de frente a quien te arrastra al kamikaze y te hace bailar un tango en el medio de la noche.
Sabes que no estoy loca, todo lo contrario, sabes que tengo tanta libertad como para andar en tetas por plena libertador, tanta libertad como para amarte toda la vida y tanta libertad para huir, y no volver jamás.
No le tenes miedo a mi insensatez, le tenes miedo a mi libertad.
Para un poco varon, y mírame de frente, que no se te achique el corazón de miedo, que no te dé por las bolas sentir que podés llegar a ser menos. Agárrame bien fuerte la mano, que está deconstrucción hollywoodense de que vos sos hasta el que tiene que dar más amor, va para rato.
No le tengas miedo a esta mujer, que con solo mirarte te endurece hasta el rayo tormentoso, y te pone a pensar un sábado por la madrugada mientras las multitudes hablan, el vino corre y yo flameo en tu mente.
Soy vida, mojate en mi y empeza a renacer.

Entradas más populares de este blog

Quien Dice - Salta La Banca

Ultima carta de Frida Kahlo a Diego Rivera

🦇